Dado que la fibromialgia es difícil de controlar con analgésicos, muchos pacientes buscan aliviar su dolor con terapias alternativas como, por ejemplo, los cannabinoides. Aunque aún existen pocos estudios clínicos sobre el efecto del cannabis medicinal en esta enfermedad, se ha demostrado que el consumo de derivados del cannabis tiene efectos beneficiosos sobre algunos síntomas de la fibromialgia como el alivio de dolor y la rigidez muscular, mejorando de esta manera la calidad de vida de los pacientes.
Un estudio de 2008, demostró una mejoría significativa del dolor y de numerosos parámetros asociados a la fibromialgia tras la administración de un cannabinoide sintético durante dos semanas .
En otro estudio de 2011 se pudo observar, además de una mejora del dolor y la rigidez, un aumento del bienestar general del paciente tras la administración de cannabis tanto vaporizado como por vía oral.
A causa del potencial terapéutico de los cannabinoides en el tratamiento de la fibromialgia y la poca oferta de tratamientos efectivos existentes se están llevando a cabo numerosos estudios para entender mejor tanto la enfermedad como sus posibles tratamientos.